“Están pifiando y feo” advirtió el secretario general de La Fraternidad
20-02-2020 21:37
Uno de los hombres fuertes de la CATT y titular del sindicato La Fraternidad, Omar Maturano, fue contundente respecto a la tesitura de la CTA de los Trabajadores y en particular del líder de esa central, Hugo Yasky. “Cuando hablamos de la unidad del movimiento obrero,
parece que está todo bien. Ahora, si no defendemos la vigencia de las
paritarias, con cláusula gatillo o revisión concreta y que los jubilados
merecen un aumento acorde a la crisis, estamos pifiando feo”, enfatizó.
Maturano salió al cruce de los dichos de Hugo Yasky respecto a que las claúsulas gatillo motorizan la inflación y no deben ser parte de los convenios salariales del año.
La secuencia tiene un trasfondo particular. No es secreto que muchos dirigentes de la CGT consideran innecesario sumar a sus pares de las CTA, en parte por diferencias históricas que nacen incluso antes de la separación de las centrales. La apenas disimulada reticencia es extensiva a los movimientos sociales más allá de los foros que suelen compartir desde el 10 de diciembre.
Empero aún en el respaldo al Gobierno, denominador común de esas tres centrales en la era del gobierno del Frente de Todos, las diferencias se enmarcan en tono grueso. “Uno puede dejar de lado que alguna vez ellos (por las CTA) apuntaron a este sector del movimiento obrero señalando a la CGT como burócratas. La unidad, como dicen otros compañeros está por encima de eso. Pero si vamos a resignar la responsanbilidad que tenemos como dirigentes sindicales más vale que cerremos todo y nos pongamos a jugar a la política”, desafió Maturano.
Más allá de que también en ocasión de diferentes mesas convocadas por el gobierno anterior el jefe de La Fraternidad fijó una dura postura, e incluso decretó la última huelga de una organización sindical contra la política de Cambiemos, en ocasión de un paro de maquinistas que paralizó ese transporte a principios de noviembre, el cambio de mando en la Casa Rosada, no desactivó posturas críticas.
Semanas atrás Maturano consideró que un gobierno popular no puede renegar de la vigencia de las paritarias, “como un derecho tradicional consagrado por el peronismo”, frente a la inquietud de la Casa Rosada para llevar las mejoras salariales desde sumas fijas. En esa oportunidad el jefe de La Fraternidad incrementó la apuesta para considerar que “la preocupación que nos tiene que movilizar es que los trabajadores en actividad y los jubilados recuperen al menos parte del poder adquisitivo que perdieron en sus ingresos”.