El Eternauta

El Eternauta, la célebre historieta argentina de ciencia ficción creada por Héctor Germán Oesterheld y el dibujante Francisco Solano López a fines de los años 50, llegaría a la pantalla de Netflix en forma de serie.



En las redes sociales revelaron que para adaptar la novela gráfica de Héctor Germán Oesterheld el gigante del streaming invertirá 15 millones de dólares.
Esta mañana el rumor circuló con el poder de una nevada mortal: la adaptación audiovisual de El Eternauta estaría a punto de concretarse.
Jorge Rial fitró la info desde su cuenta de Twitter.
“Me dicen que hoy están llegando los capos de @NetflixLAT para cerrar formalmente el contrato para llevar a su pantalla El Eternauta.
Sería una inversión de 15 millones de dólares.
La primera gran producción nacional para esa plataforma.
Una muy buena noticia”, escribió el periodista.
El anuncio oficial podría llegar a darse mañana en CheNetflix, evento donde se darán a conocer cuáles son las próximas realizaciones de la plataforma concebidas y producidas por talento local.
Mientras siempre una generación que siguió la historia desde adolescente soñó conque alguna vez la historia llegara a convertirse en una película catástrofe realizada en Argentina, hubo que acostumbrarse a ver los homenajes insospechados e influencias veladas a El Eternauta en producciones como La niebla y Falling Skies.
Falling Skies cuenta la historia de las secuelas de una invasión alienígena que, además de neutralizar toda la tecnología avanzada y la generación de electricidad, elimina a la gran mayoría de las fuerzas militares de todos los países en un tiempo corto.
Se infiere que cerca del 90% de la población mundial fue eliminada en la primera ola del ataque.
La historia comienza 6 meses después de la invasión.
The Rain no proviene de Holywood sino de Escandinavia y con el tono de asfixia apocalíptica en forma de lluvia.
«La niebla» lleva a pensar en «el Eternauta», no tanto por los bichos, como por la atmósfera lograda en ambas obras de alienación .
Incluso coinciden en temer en ocasiones más a los otros humanos que a lo desconocido.
Tanto el momento en que se propaga la niebla, como los bichos (especialmente los gigantescos) se asemejan tanto a la nevada inicial, como a escenas posteriores de El Eternauta especialmente cuando aparecen los Gurbos demoliendo edificios enteros.
En cierto modo, tanto El Eternauta como La Niebla (The Myst) parecen querer ir más allá de una mera historia de ciencia ficción.
A esta altura, la ilusión de ver en pantalla el ataque extraterrestre en suelo porteño imaginado por Héctor Germán Oesterheld parecía destinada al fracaso.
Directores de la talla de Adolfo Aristarain, Pino Solanas, Lucrecia Martel, Damián Szifrón soñaron con realizar su versión de la invasión perpetrada por Los Ellos y que acontecía en escenarios como la cancha de River, Barrancas de Belgrano y la Plaza del Congreso.
De hecho hubo una reunión muy importante en el café Tortoni hace ya algunos años entre Aristarain y Solano López y luego con Elsa Sanchez de Oesterheld con la intención de avanzar en un proyecto cinematográfico presuntamente apoyado por el sistema de cables de los EEUU.
Toda una serie de conflictos legales, diferencias creativas y problemas de costos imposibilitaron la concreción del proyecto.
Enrique Piñeyro, al menos, pudo dirigir un corto como promoción del Bafici 2010 llamado «Nieves del tiempo» donde aparecían algunas de las inconfundibles postales de la novela gráfica.
En los últimos años, por otra parte, aparecieron en la web algunos homenajes en formato de cortometraje.
Cabe mencionar la animación 60 segundos de oscuridad de Pablo Conde y The E proyect de Nicolás Duce, un test que adecuó la nevada mortal, los platos voladores y los ataques de los cascarudos al presente.
El Eternauta fue publicada inicialmente en Hora Cero Semanal de 1957 a 1959.
Tuvo gran cantidad de secuelas y reediciones.
Tras edición 2015 de Fantagraphics Books para Estados Unidos, obtuvo tres nominaciones a los Premios Eisner, resultando ganadora en la categoría a
Mejor colección o proyecto de archivo de tiras de prensa.
Esta obra clásica estuvo marcada por la censura política en diferentes etapas.
En 1977 la dictadura militar persiguió y desapareció a su creador y prohibió todo tipo de reproducción y distribución de El Eternauta.
Héctor Germán Oesterheld que militaba en la parte cultural de la organización Montoneros junto al prestigioso escritor y político del peronismo,  Mempo Giardinelli y otros compañeros y compañeras fue secuestrado, mantenido en cautiverio durante algún tiempo en el que se le hizo escribir una historieta sobre San Martín por los mandos de las fuerzas armadas de la Dictadura del Proceso y finalmente fue asesinado en lo que constituyó un delito de lesa humanidad.
Sus hijas, Diana, Marina, Estela y Beatriz Oesterheld, cuatro jóvenes y bellas artistas de la literatura, la poesía y el arte gráfico , militantes de la UES dos de ellas, al igual que los chicos y chicos de La Plata que sufrieron la Noche de los lápices, fueron secuestradas y asesinadas, sin dejar rastros.
Las otras dos, militantes de la Juventud peronista al igual que sus parejas, tuvieron dos hijos, uno Miguel Martín Mórtola, y el otro Fernando Araldi que fueron entregados a sus abuelas para después ser asesinadas y desaparecidas.
Mortola y Araldi están buscando con las Abuelas, a otra hermana.
El Eternauta nació como una potente metáfora política, los Ellos invaden el planeta tierra, pero la acción que se registra sucede en la ciudad de Buenos aires en los años 50 cuando la revolución “libertadora” se cierne sobre el gobierno peronista.
Los vecinos del barrio, la esposa y la hija del hombre de la casa, un tipo común,un obrero, un científico y un periodista e historiador se unen para luchar contra el invasor.
Es una historia que indudablemente remite a la Resistencia peronista que también establece una alianza de clases ante el enemigo común.
Iñigo Errejón,  joven político español de Podemos (por entonces), me pregunto un día en la Oesterheld porque tenía tanto éxito el Eternauta y su versión de El Nestornauta por aquellos días.
Yo le dije que El Eternauta era una historia circular que terminaba antes de comenzar y que para nosotros, el viajero del tiempo que volvía a nuestra época en la figura de Néstor, era Perón
Hay mucho que decir sobre este tema.
Lo que no podemos decir es que El Eternauta no sea una lucha por la liberación de nuestro pueblo.